Por Eduardo Ceballos

“Mi sueño era llegar a ser un gran músico y armar una orquesta, pero lo que más me gustaba era cantar» D. Toro
Como gran hacedor de nuestra cultura, quizo despedirse de su tierra en un día patrio, 25 de mayo de 2023, pero su figura será recordada en cada canción que compuso y en cada recuerdo de los que tuvieron la dicha de conocerlo, porque su figura representa nuestro folklore argentino y salteño.
Sobre la idea de patriotismo señalaba: La palabra patriota es hermosa. Patriotero no. Y me preocupan las cosas que van a terminar con el hombre. Quizás tenga que comenzar de nuevo, con una nueva semilla. Y un argentino nuevo. No sé si lo veremos, pero ese es mi deseo”.
En diálogo con el diario La Nación (2021)
El gran cantor popular Daniel Toro, nació en Salta el 3 de enero de 1941, se constituyó desde muy joven en un prolífico compositor, ya que compuso más de 1000 temas musicales, que han sido interpretados por grandes figuras de la canción argentina.

Muchas de esas canciones son parte del cancionero argentino y latinoamericano. Se destacan: ‘Para ir a buscarte’, ‘Cuando tenga la tierra’, ‘Zamba para olvidarte’, ‘Mi mariposa triste’, ‘Esta noche canta Salta’, ‘El Cristo Americano’, ‘Nostalgia mía’, ‘El Antigal’, ‘Mi principito’, ‘Escríbeme una carta’ y muchos más compuestos con Ariel Petrocelli, Julio Fontana, Lito Nieva, Néstor César Miguens, César Fermín Perdiguero.
Integró distintos grupos musicales desde 1959, como ‘Los Tabacaleros’, ‘Los Forasteros’, ‘Los Viñateros’ y ‘Los Nombradores’, con quienes empezó a recibir reconocimiento, hasta iniciar su carrera como solista en 1966.


Un año después, en 1967, obtuvo un impresionante éxito en el Festival de Cosquín, recibiendo el Premio Consagración de ese año. Todavía resuena en la memoria popular la interpretación de ‘Indiecito dormido’, que le puso el sello de distinguido.
A partir de ese momento su fama fue creciente. Grababa álbumes que tenían gran repercusión popular. Un auténtico representante de su provincia, de su raza, de su pueblo.
Nada pudo silenciarlo, ni la dictadura militar que lo incluyó en las listas negras, porque sus canciones fueron prohibidas; tampoco pudo el cáncer de garganta que lo asoló en 1979. Le ganó a todo lo adverso que se le presentaba. ‘La porfía del arte’, su disco de 1983, lo mostraba vigoroso y sensible, resucitaba en cada canción. Andaba por los escenarios repartiendo las bondades de su canto.
El artista también habló sobre cómo recibió el duro golpe del diagnóstico de cáncer de garganta e hizo referencia a cómo tuvo que “curar el alma” cuando no pudo cantar entre 1979 y 1985. “No tengo broncas”, manifestaba. “Lo mismo cuando prohibieron mis canciones. Lo acepté como algo que tenía que pasar (…) Dios me hace sentir que todo pasa. No soy más que una semilla.
En diálogo con el diario La Nación (2021)

En 1985 recibió el Premio Konex y el Congreso de la Nación Argentina también le realizó un reconocimiento público por el importante legado entregado a la cultura popular argentina y por su tenacidad para superar las adversidades.
También recibió un reconocimiento a su trayectoria de la Asociación Argentina de Intérpretes (AADI) en acto público, en el espectáculo ‘AADI Haciendo Caminos’ en Salta.


Nunca dejó de componer, porque su guitarra es una prolongación de su vida.
En el año 2004, se realizó un ‘Tributo a Daniel Toro’ en el Teatro Astral de la ciudad de Buenos Aires, por donde pasaron amigos talentosos para honrarlo como Los Fronterizos, Los Nocheros, Zamba Quipildor, Ariel Petrocelli, Abel Pintos, Yamila Cafrune, El Chango Nieto.
Dejó un gran legado cultural a través de sus hijos Claudio, Facundo, Carlos, Daniela, que llevan su sangre, su bandera y su canto.
Recientemente se realizó un documental sobre su vida, como homenaje a su trayectoria: