Argentino Morales, un autor con nombre de Copla.

Por Emilia Baigorria

Argentino “Tino” Morales  autor de Coplas con Tino nació en Salta en 1943. Su familia fue el entorno cultural que estimuló la lectura y sus estudios de maestro y de Antropología.

El autor propone un viaje en dos direcciones: uno, hacia el universo más profundo del ser donde habitan los sentimientos. Allí están los anhelos, alegrías, tristezas, el paso del tiempo. El poeta coplero crea en ese universo el retrato de su Intrahistoria.

La otra dirección es el mundo externo y se despliega a su vez en cuatro orientaciones destacando los pueblos y ciudades de la Provincia de Salta conmoviéndose con la belleza de los Valles Calchaquíes. ¡Brindo al Valle Calchaquí / y por sus pueblos que encantan! Fueron matrices iniciales/ del ser y estar de mi Salta.

Si nos detenemos a escuchar las voces de su universo interior, el “yo lírico” canta y explota ese silencio guardado cuando expresa:

De tanto callar ofrezco

Quiero decir y no digo
y sin decir voy diciendo.

Muchos son los temas que aborda el autor, entre ellos la  presencia de la mujer y con ella, el amor:

La belleza es alegría
y más si es de una mujer,
así se alegran mis ojos
cuando la vuelven a ver.

Si la luna se cayera
de pronto en medio del río,
seguro va a ser tu culpa
por pedírmela, amor mío.

Si pronunciaba tu nombre,
miel era el aire en mis labios,
y el corazón que iba exangüe
cobraba vida en el aire.

También el otro rostro: el desamor.

La noche se volvió día
y el día se oscureció,
así se puso mi mundo
cuando me dijo que no.

Árbol noble compañero,
te han talado igual que a mí;
sin tus ramas sigues firme,
sin su amor, sobreviví.

Encaminaré mis pasos
hacia el árbol del olvido,
solo a él confiaré el dolor
del querer sin ser querido.

La alegría se me ha ido
se marchó yéndose lejos;
los días ahondan la pena
sabiendo no habrá regreso.

También coplas eróticas:

Rubia y morocha, fogosas,
pelirrojas, un incendio,
como persona curiosa
quiero afrontar esos riesgos.

Tarde al viejo brotan mañas,
de mirón de las mujeres,
sin pudor clava sus ojos
mirando lo que no debe.

Y las coplas tradicionales, que hablan de la tierra, la muerte, América:

Los cerros están nevados
y corre un aire muy frío
nuestro cariño lo sufre,
se fue quedando vacío

Es increíble que el tiempo
nos juegue este mal pasar
nos sentamos y miramos
no sabemos de qué hablar.

Madre Tierra, madre humana,
como dadoras de vida
sustentando a sus criaturas,
deben ser bien protegidas.

La tristeza del Otoño
tiene origen y motivo:
saber le sigue el Invierno
y que él clausuró el Estío.

Agua, fuego, tierra y aire,
que sabios antepasados,
por verlo integrado al hombre
al Universo creado.

Desde cada una de las coplas de “Tino” Morales emerge la vida cotidiana, rotunda, sincera, sin artificios.

El autor clama por su anhelo docente. Su poema Al Maestro conmueve por su realismo y admiración a esa profesión: la más ejemplar y bella.

Queda la propuesta de la lectura de este primer libro de Argentino Morales: Coplas con Tino editado por Juana Manuela Editorial.

Publicado por Juana Manuela

Empresa destinada a la publicación de textos de difernetes géneros literarios, como así también a la difusión de nuestra cultura latinoamericana.

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