Por Hilda Palermo

Madeleine Blanche Truel Larrabure, nacida en Lima, de ascendencia francesa, educada en la Universidad de La Sobornne, en París, es una heroína que la historia se ha encargado de rescatar del olvido.

Sus padres fueron inmigrantes franceses que llegaron al Perú en el siglo XIX y formaron una familia numerosa, Madeleine fue la octava y nació en Lima, el 28 de agosto de 1904. Sus padres murieron cuando ella tenía 20 años de edad y todos los hermanos tuvieron que ir a Francia a casa de parientes, año 1924.
Estando en París, se matricula en la Universidad de La Sorbonne para estudiar Filosofía y trabajaba en la sucursal del Banco Bilbao español.
En 1942, un camión nazi la atropella ocasionándole numerosas fracturas que le dejaron una leve cojera permanente.

En su tiempo libre se dedica a escribir y publica su famoso cuento: El niño en el metro, libro que cuenta el viaje de un niño por diferentes estaciones del metro de París del año 1920.
Su hermana, Lucha es la que ilustra los textos.
Durante la II guerra mundial, Francia es invadida por Alemania y Madeleine se incorpora a la resistencia francesa, donde le asignas la tarea de falsificar pasaportes y demás documentos que entregaban a los judíos prófugos y a los soldados aliados que aterrizaban en paracaídas en París. Ella utilizó el sobrenombre de Marie para no ser identificada por los nazis, sin embargo fue apresada por tres de ellos, cuando se dirigía a recoger unas tintas en uno de los escondites de la resistencia.

Fue torturada y enviada al campo de concentración de Sachsenhausen y sometida a extenuantes marchas, que al final, le causaron la muerte, pocas horas antes de la llegada de las tropas rusas a la ciudad.
Muere el 3 de mayo de 1945.

La historia ha rescatado a esta figura femenina, a la cual se le está dando el reconocimiento que merece, la Municipalidad de Miraflores, en Lima, le ha erigido un monumento en el parque Yitzah Rabin.
En su libro: La estación final, el periodista peruano Hugo Coya recoge la historia de Madeleine, desconocida para la mayoría de los peruanos, y la de otros peruanos que estaban y murieron en los campos de concentración.
En cuanto a su obra, El niño del metro, es un clásico de la literatura infantil francesa, que apareció casi conjuntamente con el Principito de Saint Exupery, después de 78 años ha sido traducida al castellano y publicada en el Perú por el Ministerio de Cultura y la editorial Maquinaciones Narrativas.
Es un libro que da esperanza y no fue censurado por el gobierno nazi.
En el siguiente enlace realizaron un cortometraje en su memoria.
