Por Argentina Mónico
“¡Abuelo bosque, montes del Chaco!
Verde sangre, verdilina copiosa cabellera,
alma azul violeta, color de enredaderas,
Patria originaria del chorote y el mataco,
señorío bullicioso de guayacanes y palos borrachos,
un bálsamo de palos santos te recorre manso,
anudado al canto de un río azul de pájaros”. (Marta Juárez)
Quién ha visitado nuestra Editorial, sabrá que no sólo abrimos nuestras puertas a personas que buscan publicar sus obras, sino a todos los que llegan a nuestra florida casa, rodeadas de plantas, con un mural de la Pachamama, que los recibe, con un mensaje de amor a la madre tierra.
Juana Manuela Editorial, tiene un compromiso social, más allá de las letras, y es el de que cada persona al llegar se sienta impregnado de naturaleza y arte.
Pensamos que los mensajes no necesariamente se comunican en palabras, todo a nuestro alrededor comunica algo, dándonos un sentido de pertenencia. Pues nosotros comulgamos con el medio ambiente, buscamos llevar un mensaje a través del arte, que nos permita reflexionar sobre el diario devenir y aquello que nos preocupa.
Decimos que Juana Manuela es más que una Editorial, porque no sólo publicamos libros, sino que cosechamos amigos, cada persona que ingresa a nuestra casa, se convierte en un amigo tertuliano, que es invitado a participar de los diversos eventos culturales que realizamos, tanto de música, muestra de arte, de cocina, como así también las famosas Tertulias literarias.
En tiempos tan vertiginosos como los que vivimos, es importante el Arte, porque a través del él podemos dialogar en otros lenguajes, podemos disfrutar de los silencios y valorar la vida de otra manera.
Sentimos que tenemos una misión en esta trayectoria de vida, y en ese camino hemos encontrado muchas personas que acompañan las ideas, que comparten sus proyectos y es así que llegamos a esta instancia de habilitar un Bosque de la poesía, en una plaza, que seguramente cobrará sentido a través de las plantas que se plantarán, pero sobre todo del cuidado que hagamos de ella y del mensaje que difundamos a la sociedad.
Qué lindo es ver cómo una idea compartida se hace realidad, y eso nos hace pensar que no estamos solos, que siempre hay un otro que da su mano amiga y que, en ese trabajo conjunto, se logran más cosas.
Con esta plaza “Bosque de la poesía”, se configura un nuevo ecosistema, conformado por los estudiantes que han aprendido sobre autores y sus obras; por poetas que han sido reconocidos y que hoy con su presencia saben que este lugar también es de ellos; de una fundación que nos brinda las plantas y que viene trabajando desde hace mucho en la protección del medio ambiente; autoridades que se sumaron a la propuesta, poniendo en valor la importancia de una ciudad verde; y nosotros que desde la editorial llevamos la bandera en alto de nuestra querida Juana Manuela Gorriti, una prolífica escritora salteña del siglo XIX, pionera de la literatura fantástica argentina, precursora en la lucha por los derechos de la mujer y de los pueblos originarios, nacida en estos pagos, en Horcones, departamento de Rosario de la Frontera.
Una librepensadora, con firmes principios patrios y una gran defensora de la mujer. Por ello generó diversas iniciativas que habilitaron nuevos espacios para las mujeres. En Lima y en Buenos Aires organizó tertulias en las que las invitaba a ilustrarse y a escribir. Se encargó de promover un público lector femenino y editó revistas junto a otras mujeres. Escribió relatos sobre mujeres destacadas en la historia argentina y sudamericana, como los casos de Camila O ’Gorman y de Juana Azurduy.
Tenía una visión americanista que contemplaba la conservación de las lenguas regionales y los rasgos particulares de cada nación, y un permanente y activo compromiso con la educación de la mujer; se preocupaba por incorporar los beneficios de las ciencias a la vida cotidiana y asumió una actitud de militancia por la consolidación de un sistema democrático de gobierno en el que las mujeres tuvieran activa participación.
“El acre perfume de los bosques acariciaba mi olfato, llevando a la mente la dulce luz de lejanos recuerdos.
-¡Horcones!, ¡Miraflores!, ¡Gualiama!- murmuraba el labio, aspirando con ansia la brisa embalsamada…” (J.M. Gorriti. El mundo de los recuerdos. Reminiscencias, p. 36)
Sin duda Juana Manuela ha sido una mujer con firmes convicciones, una luchadora sin fin, que supo de grandes sinsabores, pero en ella estaba presente su misión de lograr la libertad de los pueblos a través de la cultura. Y como ella decía: “Una vez que se ha entrado en el camino de las letras, hay que marchar, marchar siempre…”, así que asumimos ese desafío y en siete años transcurridos hemos apostado a la cultura y a su difusión sin descanso.
Tenemos siempre presente nuestra misión y sabemos que el mundo editorial, tiene un papel relevante en la promoción de la sostenibilidad, porque tenemos la capacidad única de influir en la sociedad a través de la información que se plasma en cada obra, somos mediadores para la construcción de una cultura que debe apostar a la defensa de los valores y del cuidado del medio ambiente.
Por ello asumimos un compromiso de sostenibilidad para con el medio ambiente a través de diversas iniciativas, como son la impresión ecológica, el libro digital, charlas culturales sobre la importancia de la Naturaleza, y la habilitación de espacios verdes, desde el proyecto de Bosques de la Poesía, para contribuir al bienestar de nuestro planeta y hacia un futuro más verde y sostenible.
Recientemente hemos participado en el concurso de la empresa Ledesma, “Embajadores del cambio” donde hemos resultados finalistas entre más de 100 proyectos presentados en todo el país, justamente desde la publicación de un libro impreso con “papel ecológico”.
¡¡SOMOS FINALISTAS!!
Reafirmando nuestro compromiso, en el día del Medio Ambiente, 5 de junio, inauguramos el Bosque de la poesía en los pagos de Juana Manuela Gorriti, el departamento de Rosario de la Frontera (Salta), sumando nuestro granito de arena para que sea un espacio donde se comulgue el arte, la naturaleza y nuestra cultura.
Somos un pueblo que tiene arraigada nuestra cultura ancestral, que rinde homenaje a nuestra Madre Tierra, la Pachamama, una creencia asociada al sustento y la fertilidad, que, desde tiempos inmemoriales, nuestros ancestros han cultivado, protegiendo a la divinidad madre agrícola de la fertilidad, la Madre Tierra.
Sigamos entonces el camino de nuestros ancestros respetando y cuidando la Pachamama, porque es quién nos brindará el sustento para nuestra vida y de las generaciones futuras.
A manera de cierre, la voz de un poeta que se crio en esta tierra, Abel Mónico Saravia:
A UN LAPACHO TENDIDO
Yo he visto un árbol caído
floreciendo desde el suelo.
El inclemente progreso lo tumbó,
como a otros tantos.
Pero una raíz fortuita
le conservó la sustancia
y desde allí, lentamente,
la vida fue recobrando.
Le fue subiendo de a poco,
lentamente, palmo a palmo,
por el tronco y los ramajes
para florecer lapacho
y entremedio del incendio
volver a ser palo macho.
El fuego ni el hacha aleve
no pudieron dominarlo
y, aunque en el suelo tendido,
desde el suelo está brindando
su canto de rosa al cielo,
que en flores convierte el llanto.
Canto rosa de la vida.
Ejemplo para el humano.
Desde el suelo tú floreces
y no te andas arrastrando.
Saquen ejemplo los hombres,
ejemplo de este lapacho.
Las Tertulias de Juana Manuela 