Por José Cantero Verni

Cabalga Martín Miguel
debajo de las estrellas,
coraje porta de poncho
y valentía en las venas.
Lo siguen los infernales
con esa sangre salteña,
que no se rinde ante nadie
en cualquier parte que sea.
Lo sigue también el viento
con el clarín de la guerra,
mientras la luna del cielo
con gran orgullo lo observa.
Cabalga Martín Miguel,
cabalga sin una queja,
tiene un sol en la mirada
y un lucero en las espuelas.
Los cerros y las quebradas
le sirven de centinelas,
y los ríos a su paso
callados lo reverencian.
Cabalga Martín Miguel,
va camino a la frontera,
con el fervor en el alma
y la bravura de herencia.
Reluce el sable en la noche
y dando lucha no ceja,
con sus gauchos a la carga,
en pos de la independencia.
Cabalga Martín Miguel,
cabalga y al frente lleva,
un grito de libertad
para romper mil cadenas.
Parece un volcán en llamas
que a los cañones enfrenta,
pura pólvora encendida
que audacia en el campo muestra.
Cabalga Martín Miguel
a paso firme en la huella,
sin miedo alguno a la muerte
por defender esta tierra.
Su nombre retumba lejos
y adentro del pecho suena,
en el aire se hace canto
y en cada mástil, bandera.
Cuando ataca con sus hombres
no hay enemigo que pueda,
en el campo de batalla
parar su enjundia y su fuerza.
Cabalga Martín Miguel
debajo de las estrellas,
coraje porta de poncho
y valentía en las venas.

