Por José Cantero Verni

Homenaje a Gustavo «Cuchi» Leguizamón
Una luna sobre un piano
con un puñado de sueños,
mientras aromas de zambas
el aire van envolviendo.
Toca las teclas el «Cuchi»
las teclas del sentimiento,
para robarle a la noche
el más encendido beso.
¡Ay! Cuchi Leguizamón
tus notas remontan vuelo,
con ese suspiro tuyo
enamorado y eterno.
Una luna sobre un piano
bailando se hace pañuelo,
y el vino sigue cantando
si Balderrama está abierto.
El «Cuchi» nunca se duerme
el «Cuchi» vive despierto,
va pintando serenatas
con los acordes del viento.
¡Ay! «Cuchi» Leguizamón
tus notas remontan vuelo,
con ese suspiro tuyo
enamorado y eterno.
