Las Coplas de Don Abel

Abel Mónico Saravia un gaucho de ley

Arturo Chauque le brindo,

éste sincero homenaje,

que su cielo sea de plumas

y que los gallos le canten.

Los laureles un primor,

de verde arroyo y rocío,

en el fondo la quebrada

se oye el murmullo del río.

Es riqueza que se quema

que se quema sin piedad,

es el hombre que destruye

en su afán de progresar.

Antes era pollito tierno

ahura soy gallo de espuelas,

echenmé al reñidero

jueguen la plata que quieran.


Soy como la charata

cuando la quieren cazar,

se agacha, amaga el vuelo

y se queda donde está.


Soy como el algarrobo

pura flor, pura espina,

parece que nada valgo

pero doy perfume y vida.


Se ha muerto mi caballo,

se le han acabao los pesares,

se lo ha llevao la cuervada

serenito por el aire.


La luna pálida y sola

con su distante mirada,

contempla serena

como mi vida se acaba.

Soy pobre, tengo todo,

a nadie podría envidiar,

soy libre como el viento

que más puedo desear.


Soy criollo fronterizo,

de los pagos de Gualiama,

las estrellas son mi techo

el duro suelo mi cama.

Asocc. Cultores de la copla

ABEL MÓNICO SARAVIA

DEL LIBRO: BAJO EL CIELO DE GUALIAMA.

ED: JUANA MANUELASALTA

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