Por Lucila Moro

La industria farmacéutica enfrenta críticas por los altos precios de los medicamentos y la duración de las patentes. No obstante, las empresas argumentan que estos precios son necesarios para recuperar los costos masivos de investigación y desarrollo.
La intoxicación por medicamentos es un problema grave de salud que puede ser letal si no se trata a tiempo.
En Argentina, un caso reciente y alarmante es el del fentanilo contaminado, que ha causado más de 100 muertes en hospitales de varias provincias.

Causas de la intoxicación por medicamentos
- El uso inadecuado: tomar dosis incorrectas o mezclar medicamentos sin supervisión médica.
- Falta de control de calidad: problemas en la fabricación o distribución de medicamentos pueden llevar a la contaminación o adulteración.
- Error médico: administración incorrecta de medicamentos o falta de monitoreo de pacientes.
Las consecuencias de las que poco se dice:
- Daño a la salud: los medicamentos contaminados o mal utilizados pueden causar graves problemas de salud, incluyendo infecciones, reacciones adversas y muerte.
- Impacto en la sociedad: la falta de confianza en el sistema de salud y la industria farmacéutica puede tener consecuencias sociales y económicas graves.

Prevención:
- Seguir instrucciones médicas: ¿es fundamental seguir las indicaciones de los profesionales de la salud para evitar problemas?
- Control de calidad: los laboratorios y las autoridades sanitarias deben garantizar la calidad y seguridad de los medicamentos.
¡NO SE CUMPLEN!
Vigilancia y monitoreo: es importante reportar cualquier problema o reacción adversa a los medicamentos
En el caso del fentanilo contaminado en Argentina, se investigan las responsabilidades y se toman medidas para prevenir nuevos casos, incluyendo el retiro de los medicamentos contaminados y la investigación de los laboratorios involucrados.

El proceso de llevar un nuevo medicamento al mercado puede tomar más de una década y costar miles de millones de dólares, y la mayoría de los proyectos de investigación no llegan a la fase final.
A pesar de eso aparecen nuevos medicamentos cada día como de milagro.
Estamos tan confiados que esas empresas multimillonarias siguen los protocolos de control y calidad rigurosamente como hace casi un siglo atrás desde la penicilina.
¿Quiénes son? ¿Quién manda y ordena? ¿Quién financia y cómo?
Responder a esas preguntas es como atreverse y tomarse el tiempo de leer la ficha de cada medicamento que tomamos a diario, pero mientras tanto las compañías farmacéuticas priorizan las ganancias sobre la salud de los pacientes, ocultando información o vendiendo medicamentos peligrosos.
Existen muchos casos documentados de malas prácticas o errores en la industria, estos no son la excepción, son la regla.
¿Hablamos entonces de la salud global o de envenenamiento planificado?
Esas compañías farmacéuticas pretenden ser pilares fundamentales de la atención médica moderna.
Invirtiendo miles de millones de dólares en investigación y desarrollo y ser responsables de descubrir y producir los medicamentos y vacunas que han erradicado enfermedades, tratando padecimientos crónicos y salvando innumerables vidas.
¿Que nos esconden?


Y te quedas corta con las consideraciones, pues los fármacos afectan órganos vitales que los grupos de farmacéuticas callan, además pagan a los médicos para que receten los medicamentos aunque sepan que son realmente onerosos para los usuarios, además, aunque pudieran producir medicamentos que pudieran curar, callan para mantener el negocio que produce miles de millones de dólares. Como las grandes potencias mundiales solo piensan en el lucro económico. Este es un mundo hecho para los deseos egotistas de las productoras de drogas que menguan la salud de los seres humanos.
Me gustaMe gusta